Las reliquias más raras del mundo

 

Reliquias extrañas e increíbles

Parece ser que el fenómeno de las reliquias fue una planificación de iglesia durante una larga época, porque con ello entendía que se fomentaba devociones, cultos y, en resumen, aumento de feligreses. Hoy día le quieren quitar importancia al asunto, ya que además, las inmensa mayoia de estas reliquias son falsas. Sobre todas estas piezas la Iglesia Católica es clara. Las reliquias no se veneran en sí mismas, sino por razón de las personas con las que están relacionadas. Además, se advierte la necesidad de evitar todo fraude, de apuntalar su procedencia mediante certificados incuestionables y está prohibida toda forma de comercio y de degeneración supersticiosa.

 

Entre las reliquias divinas hay dientes, nos encontramos con más de 64 dientes de leche del Niño Jesús que son venerados en toda Europa. Mahoma no se queda atrás,  parece ser que Mahoma tuvo una pelea con unos infieles y como resultado  perdió cuatro dientes, dos de ellos se encuentran en el museo nacional de Turquía en el palacio de Topkapi. Pero el diente más poderoso que existe se encuentra en el templo Sri Dalada Maligawa de la ciudad de Kandy, en Sri Lanka. Se trata del canino izquierdo de Buda, que al parecer le da el poder de gobernar el mundo a quien lo posea, razón por la cual es cuidado sin descanso por monjes celosos de que caiga en las manos equivocadas.

Hay 2 catedrales en España que dicen tener espinas de la corona de Jesús. Esa corona con la que fue crucificado.La catedral de Oviedo afirma tener 5 de las espinas de la corona, mientras que la catedral de Sevilla dice tener 4.

Una reliquia excepcional es el cuchillo con que se circunsiso a Jesucristo. Hubo más de uno y el que se conserva esta M.P.C. en Roma. También se veneró en Calcata (Italia) el Santo Prepucio del niño Jesús

Una campana en cuya fundición se utilizó el cobre de una de las treinta monedas que cobro Judas, y que se conserva en Velilla del Ebro, España.

Hasta el siglo pasado, el arzobispo Albrecht de Mainz presumía de tener en su catedral dos plumas y un huevo del Espíritu Santo, cuando se convirtió en paloma. Quien dejara un donativo después de visitar esta reliquia, tendría perdonados todos los pecados.

Hasta principios del siglo XX, cuando desapareció, en el monasterio de El Escorial se exhibía una pluma que se le habría caído al arcángel Gabriel mientras batallaba con el diablo. Esta reliquia atraía gran cantidad de peregrinos, que querían admirarla con sus propios ojos.

Varias iglesias en Italia y Alemania también han exhibido plumas de los arcángeles Miguel y Gabriel y de otros ángeles, así como pedazos de sus túnica. También se guarda la pluma que utilizó el evangelista Marcos para escribir su Evangelio

Una de las reliquias más poéticas es la de los rayos de la estrella de los magos y que tiene en su colección El M.P.C.

En la catedral de Sevilla se dice que hay  la mesa de la última cena de Jesús con sus discípulos, pero la misma mesa también dicen que está en una catedral italiana, ninguna de las dos mesas ha sido reconocida como la auténtica mesa donde Jesús cenó por última vez.

En el Monasterio de Santo Toribio de Liébana (Cantabria) se encuentra La reliquia más grande considerada del “Lignum Crucis” de Cristo  fue llevado a Cantabria con los restos de Sto. Toribio de Jerusalén en tiempos de invasión musulmana desde Astorga. Toribio había sido Guardián de las reliquias en Jerusalén En 1958 un estudio concluyó que era madera que podría ser de los tiempos de Cristo y de ciprés “Sempervivnes L.”, que abunda en Palestina.

 

No podía faltar el mítico grial, el caliz de la ultima cena, que se venera en la catedral de Valencia, y los incomprensiblemente también auténticos griales, que se encuentran en Borionda, "El Santo Catino" en Génova, "Il volto santo" en lucca. Hay otro en el convento de Lyon y por último el de la catedral de Reims.

 

La Santa Leche de la Virgen María, La reliquia se conserva en una redoma de cristal en la catedral de Murcia, adornada por una espléndida estrella de oro y protegida en una custodia de plata y diamantes. Para admirarla basta con acercarse al Museo de la Catedral, donde está expuesta. La denominada Santa Leche permanece todo el año coagulada, hasta que se produce el milagro de su licuación, volviéndose líquida cada 15 de agosto.

 

Quizá la reliquia más rara sobre el planeta sea un suspiro de San José, que se encuentra en una botella depositada por un supuesto ángel en una iglesia de Blois y conservada en el Sancta Santorum del Vaticano.

Pero hay otra reliquia que supera toda imaginación, se trata del Estornudo del Espíritu Santo, que se conservó durante siglos en una botella en la parroquia de San Frontino, hasta ser trasladada al interior de los muros vaticanos.

La columnasobre la que cantó el gallo de San Pedro. Se encuentra en San Marcelo de Roma.

En Murcia existe desde 1730 en la Catedral: «la mayor reliquia que se puede tener en este mundo, que es un pelo Vultus Divini Jesuchristi». Se trata de un pelo de la barba de Cristo que competirá desde enton­ces con la máxima reliquia del momento, el Lignum Crucis –un trozo de la cruz– utili­za­do incluso como conjuratorio contra plagas y tempestades

Algo extraña, es la reliquia de los pelos de la cola del asno que llevó en sus lomos a Jesús. Una ha desaparecido y otra se conserva en M.P.C
 

El anillo nupcial de Santa María virgen encuenta en Albacete.  Pero hay otro identico pertenece a los herederos británicos del duque de Berry. Una Oreja de San Pedro, que es propiedad del abad de Cleriac y de San Leonardo en Porto Mauricio.
Una sandalia  de Jesucristo,   que actualmente está en el Vaticano. la Santa Silla en la que Él se sentó durante la Última Cena, el Bastón con el que Le golpearon en la cabeza coronada de espinas, la Santa Caña que sujetó la Santa Esponja, las 13 lentejas que formaban parte del menú de la Última Cena. Pero probablemente la más original de todas las reliquias veneradas es la huella del culo de Jesucristo, que quedó sobre la piedra en que se sentó y que se venera en Reimss. También se conserva y veneran la huella de sus pies, que se guardan en el museo del Capitolio. Juntamente a esas huellas de pies, tenemos la de la Virgen María en la antigua iglesia de Leixetia. Como reliquia fantasiosa tenemos la del vestido púrpura que por lo visto Herodes regalo a Jesucristo y que se venera en la catedral de Valencia.

 

La emisión pública de Santas reliquias o su autentificación competen a autoridad eclesiástica no inferior al grado de obispo, que a su vez adquiere tales derechos de la "Sacra congregatio pro sacramentis et culto divino".
El certificado de autenticidad que debe siempre acompañar a la reliquia es signado por la autoridad apropiada, el uso de sello expreso, colocado sobre el lacre del relicario o sobre sus certificados, debe corresponder igualmente a esta. Para este escrito son de interés la reliquias que tienen que ver con Jesús y personajes de su entorno o que figuran en su historia.